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Vol. 11 Manila, l de septiembre de 1923. Num.

35

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EN LA PLAYA Por "El Solitario".

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EMPAREDADOS.-SOCIAL.-SEMANA-

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1 SUMARIO 1

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1111:

L~i~~~~~NARIOS

^DEL Por Paulinu. ,1,1 Ir

~ :"llRLOS BLANCOS Por Luís \largas. ~

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JESUS, SEGU:"ll EL PASTOR Por " F i l a d e l i o " . I

I,~

~ GRANT ~

~'

^LIMADURAS Por E. L. Ferreiro.

'¡~

~

^- EL PALO Y LAS ASTILLAS Por 1892. ~

¡BENDITO SEA DIOS! Por Celas.

I~

01 EL CRISTO DE QUIAPO Por P. de Isla.

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1 ESTUDIO 1

:• REVISTA SEMANAL •~

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Esta Reuista se publica lodos los sábados por Alejandro

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; de Aboiti: y Claudio R. de Lu:uriaga. ;

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Registrada en la Administración de Correos de íüi

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Manila como correspondencia de segunda clase. (!ll

~ 1 ^{, ~ .·:. ~}

\~. \:3>' Todos los trabajos q11e publica ESTUDIO son ori- \:: .~

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ginales y excl11sivos. Queda terminántemente íi<I

~· : prohibida Sil reproducción

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INSTRUCCIÓN-· !

es el poder que conduce al triunfo.

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Y la instrucción no es sólamente el poder ₁ que conduce <>l triunfo, sino que abre las puertas

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para la independEnci:i financiera. El triunfo puede llegar por suerte o por los amigos .r pa- ·

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1

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1

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Vol. 11 Manile, 1 de septiembre de 1923. l'um.

35

"¿Quién como la I~lesia•l ..

Vol. 11. - 1 - Núm. 35.

Sept.íembre ESTUDIO 1 1923.

''Legionarios del Trabajo"

Yá en nuestro número del 28 de al11lgicr:1i<F cltlTrabajo",porque, hecha una anunciamos cómo el Ilmo. Sr. Obispo de la exquisita inquisición de sus doctrinas, se Diócesis de Cebú, Mons. ,Juan Gorm·do se ha llegado al convencimiento de su es- había visto en la dolorosa precisión (siern- píritu e inspiración masónicos, en decla- pre es doloroso para un padre anojal' del rada pugna con los de nuestra religión.

hogar a un hijo, aunqne incmso en rebeldía) Dicen los Ilmos.

~res.

Obispos: "La de lammr el anatema de la Excomunión con- experiencia confirma plenamente el carác- tra los afiliados a la asociación conocida con ter masónico

y

contrario

·

a la religión el n:ombre de "Legionarios del Trabajo" católica, de esta sociedad, pues, es un hecho fundarla so capa de beneficencia mutua, constante que los individuos que se afilian pero teniendo en realidad más de un punto a la misma pierden luego

, la fé,

y de católi- de contacto con la secta masónica, mil veces

cos

prácticos que el'an, muchos de

ellos

se condenada por los Romanos Pontífices, hacen indiferentes

y

ateos; también

es

un como adversaria irreconciliable de nuestra hecho confirmado por la experiencia, que las

Fe. poblaciones donde sienta sus reales, se

En la Jerarquía Católica, admirable ré· vuelven frias e indiferentes en la fe y gimen guber11amental donde todos lo:; ele- olvidan

y

aún menosp1·ecian las prácti- mentos son tangentes y ninguno tropieza cas religiosas".

con otro el ejercicio de su jurisdicción, la Como pueden comprender nuestros lecto- autoridad Episcopal sólo llega hasta los res por el contenido del precedente párrafo límites de Ja Diócesis al Prelado confiada, de Ja

"Carta Circular", no

han andado los de suerte que ni el Diocesano de Cebú man- Sres. Obispos con estériles sutilezas silogís- da en Lipa, ni el de Tuguegarao en Zam- ticas para tomar el acuerdo conjunto con- boanga, ni el de Nueva·Cáeeres en Jaro, ni tra los

"Legionarios del Trabajo'', mas,

el de Nueva Segovia en Calbayog, aunque ateniéndose a los datos i· ecogidos de cui- todos ellos conservan dondequiera su ca- dad osa observación acerca de las conse- rácter de

Mitrado~

y reciben los conespon - cuencias sufridas por los fieles cuando dientes honores en cualquiera de lai; pro- por ventnra se alistan inconsciente o de- vincias eclesiásticas de la Iglesia Universal. liberada.mente en esta agmpación <le apa- De donde únicamente a los fieles sometí- riencia inofensiva, han dado en el clavo dos al gobierno del limo. Sr. Obispo de de su constitución heterodoxa, legítimo Cebú obligaban las consecuencias prove- brote de la secta del triángulo y el man- nientes de la Excomunión lanzada por di!.

Mons. Gorordo, sin que los Catófü

•os

de Por tel'l'eno firme avanzan los Sres

.

las oti·as Diócesis incurrieran en dicha pena Obispos de este Archipiélago al expresarse canónica aun en el caso de dar su nombre del modo arriba acotado y no a humo de pa- a la sociedad de "Legionarios del frabajo", jas motejan de he1·ética la asociación de Jos la cual, no obstante esta libertad de acción, "Legiona1·ios del Trabajo", porque, comen·

debía despertar sospechas muy graves en zando por sentar el disparatado e irracio- el ánimo de todos nuestros correligionarios, nal principio de "la igualdad de todas las desde el momento en que se hizo acreedora religiones'', de entre las cuales sólo UNA a la condenación del sufragáneo de Cebú. puede ser

y

ES efectivamente VERDADE-

Mas yá, los fieles de todos los Obispados RA, habiendo de ser las otras por deduc- del Archipiélago quedan sometidos a la ción

ló~ica

falsas, por el mero hecho de misma disciplina, según consta en Ja moverse fuera del efrculo de aquélla, acaba

"Carta Colectiva. de los Ilmos.

y

Rmos. negando la legitimidad de los sacramentos Obispos de Filipinas a los RR. l::lres. Pá de la Penitencia y de la Eucaristía, ridi

cu-

nocos", donde, después de algunas opor· liza la Infalibilidad del Papa, el valor de la tunas consideraciones sobre el establecí- Misa, el

culto

de los Santos y todo cuanto miento de ciertas

congregaciones

secretas, tiene algún fundamento en la divina reve- apoyadas, con más o menos disimulo, en lación.

principios de destrncción religiosa, se

COll ·

"Por todas estas razones,

continúa la

dena categóricamente el gremio de "Le- Circular Colectiva de los Prelados Filipinos,

Vol. 11.

- 2 -

^{Núm. 35.}

Septiembre ESTUDIO 1 1923.

Nos vemos obligados a

condenat' esa socie-

dad denominada "Los Legionarios del Tra- bajo", como contraria a la religión católica, y como una asociación masónica que se ha- lla incluída en el

Can. 2335",

porque "si bien diferentes en nombre, ritos, forma y origen, están unidas entre sí por cierta co- munión de propósitos y afinidad

entre sus

opiniones capitales, y concuerdan de hecho cou la secta de los masones, especie de

cen-

tl'O de donde salen

y

a donde vuelven", se·

gún la clasificación del Papa León XIII, cuya sabiduría ha alcanzado renombre uni- versal.

De acuerdo con esta disposición conjunta de los Jerarcas Eclesiásticos de

este

Archi- piélago, deben los Católicos tener p1·esentes los puntos siguientes: 1-No serles

yá lí · cito entrar a formar parte del grnmio deno-

minado "Legionarios del Trabajo", por

ha-

ber sido condenado por la Iglesia,

como

so- ciedad masónica;

2

-que quienes tuvieren la osadía de afiliarse a

ella,

o de no renun- ciar si yá estuviesen afiliados, con

"

pleno

conocimiento" de su proceder, incurren "por

ese solo hecho" en EXCOMUNlON; 3-pues son verdaderos masones, no podrán actuar de padrinos en los sacramentos de Bautiifmo y de Confirmación;

'1

·-no podrán

casarse ante

la Iglesia, siendo su enlace con una Católica ''matrimonio mixto"; 5-que de estar "notoriamente'' inscritos en ella, que- darán privados de sepultura

eclesiástica,

como no dieren señales de arrepentimiento antes de morir.

Y aúu cuando yá en otra ocasión recor- damos

a

los Católicos las consecuencias de la Exeomunión, no

estará de más volverlas

a transcribir,

a

modo de apéndicl3

a

la

Cir- cular

Episcopal: 1-No pueden los

exco-

mulgados asistir a los di vinos oficios; 2-

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Talle~~p~!~?Es;:~~~~~~tería

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Prontitud y E!smero en los Encargos

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No pueden acercarse a tos Sacramentos;

3:....

No participan de los sufragios de la Iglesia;

+ Quedan privados de sepultura eclesiás- tica. Penas que no en todos los casos tie.

nen el mismo grado de extensión e intensi dad, mas,

como toda ley humana, están su-

jetas a atenuantes, por lo

cual

debe

cada

uno

consultar, en el

supuesto de duda, a

cualquie1·

Ministro de nuestra religión, para ahorrarse zozobras

dl-' conciencia

por tomar las cosas del revés.

Dijimos

también entonces ser

derecho privativo de toda sociedad bien ordenada establecp1· leyes de admisión y

castigar de-

terminados delitos con la pena de expul-

sión, y nadie habrá de darse por ofendido cuando

se le

condenare

a esta suerte de desquite por tales o

cuales

infracciones del Código, porque no es sino el resultado del dilema donde descansa la pureza de <loe.tri- na, conservada intacta desde los tiempos apostólicos, y la estabilidad

sorprendente

de este

edificio

diecinueve

veces

secular:

o

respetar las enseüanzas de

la

legítima auto- ridad o someterse a la

consiguiente

puni-

ción.

La Iglesia Católica llora

el extravío

de sus hijos, mas atenta en todo momento al bien de la comunidad, se ve en la dolorosa precisión de amputar algunos miembros, después de haber agotado los recursos de la dulzura

y

de una

condescendencia

mater- nal.

Cuando la gangrena adquiere

propor-

ciones alarmantes y no ofrece la farmacopea

medicinas para contener los avances del mal, no le resta al doctor otro sistema cura- tivo sino el de la lanceta

y el

bisturí.

Católicos: En la obediencia

y

sumisión está nuestro mérito mayor.

PAULINO.

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Vol. II. - 3 - ^{Núm. 36.}

Septiembre ESTUDIO 1 1923.

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1

1 MIRLOS BLANCOS

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...

En el cortejo de contradicciones inherentes al oficio de periodista Católico. se dan también por 11entura algunas dedadas, de miel. Como la ración sea comúnmente muy reducida y las ocasiones de saborearla se presenten tan sólo de ciento a vien- to, muy ea·cusable habrá de ser que luégo sin di- lación acudamos a donde tañen a regalo 11 nos hol- r1uemos en él, no preciB,amente para renunciar a la brega cotidiana, mas por cobrar aliento con el paladeo de la dádiva 1J tornar después a la lu- cha con mayor fervm·. Y puesto que de poco acá estemos al yunque, y muy cerca de nosotros tenoa- mos quienes trabajan afanosamente en da1io nues- tro, 1J los ¡ectores de ESTUDIO pudieran mordel' quizá con candidez el anzuelo, 11 para des.encas- tillar a los murmumdo1'es de este lugar de refu- gio, al cual se acogieron en la esperanza de cau- sa.n1os desde él más considerable mal, vamos a quebrantar la pi·á.ctica de no dar cabida en nues- tras columnas a cosa que habría de redundar en alabanza de es.ta publicación.

Y sea la primera, un juicio publicado poi· "Ra- z6n y Fe" de su corresponsal en Manila. A oidos de todos nuestros leyentes habrá llegado alguna vez el eco de la fama mundial conquistada en bue- na lid por esa revista de los PP. Jesuitas, cu11a aparición coincidicí con la aurora del siglo XX 11 continúa veintitres años más tarde dando mues- tras de mayor estabilidad 11 robustez. Poi:· su re- dacción han ido pasando las figuras más relei·an- tes de la Compaíiia de Jesús en Es,paíia, es decir, los hombres de más talla en el templo hispano del saber y riiíió combates memorables a poco de ha- ber nacido, aun con distinguidos elementos del mismo bando Católico, por la defensa de la inte- gridad doctrinal. Pues, bien. "Razón y Fe" se expresa así en el número del mes de julio del pre- sente año:

"A fin de oponerse al descoco y desver- güenza de la prensa impía, y principalmen- te para tapar la bo.ca, acorralar y hacer mor- der el polvo a un sucio semanario que se- gún frase corriente, se alimenta de la ca- lumnia, se fundó a principios de año un se- manario culto, interesante, fogoso, de arres- tos y valiente, a quien su director D. Alejan- dro de Aboitiz, puso por título ESTUDIO.

Ya, a las primeras de cambio, retó a un doc- tor en Medicina, Pardo de Tavera célebre por su aversión al Catolicismo y conocido de los antiguos españoles que vivieron en Fili- pinas por su falta de amor na.cional, y brin- dó con una discusión formal a un joven fi- lipino educado muy a la moderna, que, ade- más de ser director de un Centro de Ense-

ñanza Superior, es Pastor protestante de celo y actividad. También h:i ayudado ESTUDIO al diario católico "La Defensa" y al Gran Caballero de Colón, D. Angel Ansaldo, en la cuestión suscitada por el cura Aglipay que se titula Obispo Máximo de la Iglesia Fili- pina Independiente. Ni el uno. ni el otro, ni el tercero han dicho esta boca es mía, y han dado la más grande callada por respuesta".

"Ideales" es una amenísima revista quincenal 1¡ue publican los PP. Dominicos del Colegio de San Alberto Magno .de Dagupan, Pangas.inán, y está de más hace'r constar los méritos de dicha publi- cación, cuando todos nue,~tros leyentes conocen de tiemp<> atrás la pléyade de sabios y literatos dominicanos empollados al caloir;illo vivificante de la Universidad de Santo Tomás. Además, si en lrt presente coyuntura entonáramos laudes, dijera aly1ín maliciosillo que brotaban de nuestro áni- mo cediendo únicamente a la presión de la corres- pondencia y la gratitud. En el número correspon- diente al 1 de ayosto ;ws dedicó un largo artículo, con este mote: "Una revista interesante", y como sed demas,iado el·tenso para reproducirlo aquí, nos limitaremos a copiar algunos párrafos:

"Se nos ofrece hoy una ocasión oportuna al presentar a nuestros lectores una revista que a todos conviene por igual, pues reúne méritos de excepcional interés. Nos referi- mos a la revista ESTUDIO que a principios de año vió la. luz pública en Manila bajo la acertada dirección del insigne periodista, D.

Alejandro de Aboitiz. Nada falta en ella que no esté a la altura del gusto y necesidades del lector más exigente. Allí se encuentran artí- culos donde la doctrina. rivaliza con la gala- nura y clasicis'.T.o de la forma, chispeantes poesías repletas de sano sabor satírico; abun- dante información, tanto local, corno gene- ral; sección de amenidades con cha.radas, ca- ricaturas y artículos de fantasía... Una de las cualidades que más acrecientan su valor es el programa que se ha impuesto y los idea.- les fijos y definidos que se ha propuesto de- fender con arma al hombro y a cara descu- bierta ... A juzgar por los éxitos yá obte- nidos, cabe esperar que logrará llegar a la meta a,petecida y retornar a su hogar con los honores del triunfo. Hasta el presente ha lanzado diversos retos a varios escritores de campanillas que se permiten disparatar en todo momento, y, al no recoger éstos el guan- te, han presentado la mejor prueba;de su in- capacidad y mala fe. Pero los mejores plá-

Vol. 11. - 4 - Núm. 36.

Septiembre ESTUDIO 1 1923.

cernes que merece ESTUDIO se deben a la briosa campaña que viene sosteniendo con- tra "The Independent", semanario que ha es- tado comb1J,tiendo el catolicismo desde su apa- rición a la vida pública ... En todo caso ES- TUDIO proporciona armas poderosas a todo católico que no tenga a menos el ser ténido por tal. Allí encuentra la solución a cuanta.s objeciones suelen presentarse en Filipinas en contra del catolicis'llo y de sus instituciones".

Todo esto es muy alentador cuando pm· ventura sopla el cierzo de la indiferencia de algunos y has- ta el "simoun" de la persecución de otros, no pre- ciBamente de la otra banda, cuyos tiros nos enar- decen paro pelea1· con mayor entusiasmo, s,ino de quienes eomen con nosotros a la misma mesa y se alimetan periódicamente del mismo pan. Pero, aunque pareceres de personas. respetabilísimas para nos.otros, son, al fin de cuentas, opiniones privadas, y tal vez las inspfró la simpatía con que nos miran o el optimismo con que juzgan nuestra pob1·e l4bor. Mas cuando la voz de aliento viene de lo álto, cuando un Prelado de la Iglesia se dig- na ?'ecomendar a sus fiel<M la lectura de nuestros escritos, no podemos menos de sentir la satisfac- ción del hijo a quien su padre alaba y• bendice, por- qúe le ve caminar por el sendero de la virtud. Se ha celebrado en la Diócesis de Tuguegarao, a cuya cabeza se: halla el Ilmo. Sr. Santiago Sancho, Pas- tor de actividad inagotable, el Segundo Sínodo Diocesano y entre las Constituciones publicadas a raíz de Bu clausura, hay ·una, la IV del Título I, que reztt así:

"Como medios principales y más conducen- tes para robustecer la fe entre los fieles, re- comendamos la predicación constante-y bien ordenada en cuanto a las materias-en todos los domingos y demás fiestas de precepto ; la

catequesis ta.nto de niños como de adultos- en las misas en que la gente acude en mayor número, Can. 1332-; la lectura de periódi- cos católicos-coT.o "La Defensa" o de re- vistas .católicas como la "Cultura Social", el ESTUDIO, etc. y persuadan a.l mismo tiem- po a los fieles que se abstengan de leer los periódicos impíos y aun neutros".

Agradecemos al Ilmo. y Rmo. Sr. Obispo de Tu- guegarao de un modo especial y en general a to- dos los Padres Sinodales esta prueba de afecto y distinción. Nuestro más estimado timbre de glo- ria será en todo tiempo habernos hecho acreedo- res a la aprobación de las Autoridades Eclesiásti- cas., a cuyo servicio sentamos plaza al fundai· esta revista y cuyas insinuaciones habrán de sonar siempre a, mandatos en esta redacción. Lamenta- mos cordialmente la campaíía de suspicacias que, en grave detrimento del buen nombré de ESTU- DIO, viene desarrollando quien está en posición ventajosa para causarnos perjuicio eJ·cepcional.

Vamos llevando en paciencia los dostrozos de to- dos aq·uellos disparos prn·venientes de nuestras mismas lineas de fuego, porque bien se nos, alcan- za cuánto favorezca los planes del adversario que descubra en el bando católico cualquie1· amago de disensión.

Pero ¡guay del que intente someter el resorte de la man.~edumbre de la víctima a una tensión superior al Hmite de resistencia! Responsable será ante los hombres de buena voluntad y, lo que es todavía más de tema, responsable será ante el tribunal de Dios de las lamentables consecuen- cias provocadas por s,u temeridad, cuando debió haber previsto los peligros encerrados en el ex- ceso de presión y acaso no paró mientes en ello por indolencia espiritual.

LUIS VARGAS.

~::_,:g¡~:::·lf1~b::~@B?:~f!fOO:~:~{!t:;~Dfilj):;;:~:;:~~::~~::~~me:::~::~:::11fi}!:;::!_iifill:;;::lfil!cJ-:::~.1;!~::~1!i:::::!J.iiJf:;;:J:;.l!!.<:;;: ~1,.,n::;:::~;i~-:(:::=~;If~i:.:::~t(i.J:t?:::Ls:t.)t:;;:::n );t_::::·~:i:.r:;'.:)i:11;m

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No está el horno para bollos, señor gra~

mátlco. '"fhe lndependent" anuncia para el número de esta semana otro escrito vuestro, y mejor os fuera si os dedicárais

a

otro oficio, teniendo en cuenta la sornan=

ta que os dió el bueno de nuestro Director, el cual no saliera por los fueros de esta re=

vista a haberme hecho caso a mí. Porque no había aun leído la primera columna de vuestro pasado artículo y yá yo os conocí.

Mas él apeló a su reconocida bondad y tuvo la atención de tomaros en serio. Nun=

ca me

diera a rní por ahí.

Si tan gentlks aficiones sentis al estu- dio de la gramática, tenéis todavía ancho

campo donde ejercitarlas, según os lo de=

mostró en sus "Pequeñeces Gramaticales"

nuestro Director. Ni haréis nada de más con dedicar vuestros ocios a perfecciona=

ros en francés, donde tan provechosas lec=

ciones os supieron dar. Y quería adverti=

ros que aun las que os dieron en la misma lengua del manco de Lepanto, no dejaban en postura muy conveniente a quien se consagra a la ENSEÑANZA DEL CASTE=

LLANO, con cátedra pregonada a son de atabal. Y no decimos más.

Q. Q. R.UCHO.

V.oL. ll.

_{- 5 -} Núm. 35.

Septiembre ESTUDIO 1 1923.

;;:~::~JDXi::::}llJr:;::lfñ1::~i!."@::::~~:~~>:~:HJ):;t:W:i~~1~~:~;.g;;;:;M.:S::::::¡~:.~>:~~::lB'Jf:;::¡mg~;::~~:::ft::.~:;::lfili:;::~;::ís:fai.:~!!CA~:::l(!ft~:::!!i..mi::::~:::~;:~!!ir~

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La historia se repite. El ·Soberano Pontífice Clemente XII, en abril de 1738, condenó a los Lib.~ri .Mw·atori o masone.~. Posteriormente. c.tros Sum.os Pontífices anate- matizaron a los masones y condenaron a los cm·bonarios, a los u.niversúa rio~ y oll'nF- sociedades secretas. Todos los Papas, hasta la fecha. incluso algunos de los que ridículamente la Masonería se jactó de contar en su fi- las como hermanos, fulminaron los anatemas de la Igle- sia contra esa Institución.

La Jerarquía eclesiástica de Filipinas acaba de conde- 11a1· formalmente a los Legionarios del Trabajo, que, des- de que el vigilante Obispo de Cebú lanzara la voz de alar- ma, no han cesado de atacar a la Religión.

En las columnas de ⁴¹Th~ Independent". el Organo ma- sonizante mús descocado que aquí sufrimos. se insertó oficiosamente una carta NEGANDO que '¹Los Legiona- rios del Trabajo" fuesen musOlH'S. Ha venido la voz de nuestros P~stores a decirnos que es "una asoC'iación ma- sónica que se halla incluida en el can. 2335". Han habla- do nuestros Prelado.S y a ningún católico puede caber ahora la más mínima duda acerca del carácter de Los Le_qionarios d.i!l Trabajo. Ni aun con la negativa de uno de los más conspícuos ma,;;oncs de Filipinas, D. Quintín Paredes, que ~s el autol' de la carta antes aludida.

No es la primera vez que la masonería funda asocia·

dones auxiliares para que ¹e ayuden a· llevar a la prác- tica planes que no se atreve o no puede realizar. Y tam- bién en esto se repite la historia.

La Jackcrie en Francia, las Comunidad.r•s en Castilla.

las Gcnnauias en Valencia y las tremendas insurreccio- nes de aldeanos en Alemania, ¿qué origen reconocen sino el de la- masonería? Más recientemente, los Comuneros c/.P, Car;:filla, los Cm·bonm·ios, los Iltoninndo . .:;, las Logias Milif(u·e . .:; y lo~ A nilleros, en España·. ¿,qué fueron sino ma.

sones? ¿Y por que. para qué y cómo y poi· quiénes fueron fundadas estas asociaciones masónicas?

Documentos masónicos hay sobrados para contestar esas preguntas. Nos limitaremos a acotar varios y a dar una ligera idea de la· organización de algunas de estas aso- ciaciones o ramificaciones de las Logias~

Los Cc11111oieros de Castillo: "El que a la sazón era So- berano Gran Comendador del Supremo Consejo de la Sa- grada Orden-escribe el prominente masón español Lean-

<lro Tomás Pastor, 1l1oisés, 33.o y se refiere a la Orden de la Masonería-para la jurisdicción de España. el ilustre patricio D. Agustín Ar1tüelles.. . considerando que la Universal Orden de Caballero!:i Francmasones 1JOr su na-

! tH"aleza cow;('JTadora, propia ele toda instit~ción cosmo- polita, no era a ¡Jropósito pco·o emprender obru de tanto y tan violento esfuerzo, que no podia efectuarse sin la subl.evación contra el in-moral ( ?) poder ·violentamente constituído (sic) ni por con.~iguiente, SIN LA EFUSION DE: SANGRE que no debía consentir SE PROMOVIERA en fos sag1·ados tcniplos (de la Masonería), ni que MAN- CHASE LA SANTA ESPADA DE LA ORDEN (masó- nica). que sólo 7mede /w,.ir a· la ignorancút, fo c11nbició·11

!J la. hipocresia. moralmente consideradas. excusando siem- pre e] daño personal de los ignorantes, los arnbi.:iosos y los hipócritas,. .. FORMó EL PLAN DE una institución transitoria (la de Los Conurneros de Castilla.) ... Es -verdad que aquel plan se CONFORMÓ MUCHO con la 01·ganiza- ' ión de la O>·den ... Para. que NO PESASE sobre la Orden frnncmasánica la RESPONSABILIDAD de /ns dispo.,i- ciones y ucfos dr aquel centro, le dió unn natuTaleza in- dependiente de ella, concretándolo a. Espa"Jia. y lo d,eno- minó GRANDE ORIENTE NACIONAL; cambió el NOM-

Vol. II. - 6

BRE de Logius en el de Torres; el de Capítulos en Cas- i illos; y el de Cámaras en Alcázares; y en lugar del Gran Consistorio de Príncipes del Real Secreto, constituyó el Gran Cam¡){lmenlo de Vil/alar ... A los extraños de la institu- ción se les <lió el nombre de .•se/avos, en lugaT del de p1·0- fa nos."

Más adelante. el mismo masón que para los profanos se llamó Leandro Tomás Pastor y que en las Logias fué bautizr:.do con el nombre de Moisés a secas, nos dice en sus Ap1rnlt's históricos de la Orden de Caballeros FTanc.

¡¡rnsonc.~ en la lengua (o nación) española: "Ambas ins- tituciones (la Masonería· y la llamada de los Comuneros de Castilla o Grandr Oriente Nacional), cada una con los medios propios de su naturaleza, contribuyeron de con-

' ""º

^{a la} reconquista de la libertad en 1820". "Tantos

y tan graves fueron los abusos y tanta fué también la transcendencia o -Ja complicidad que encontr~ron en los

TALLERES VERDADERAMENTE FRANCMASóNl-

COS, que el Soberano Gro.n Comendador D. Agustín Ar- g-üelles creyó necesario abdicar su alto cargo ... y el Con·

sejo Supremo del Grado 33 acordó sw;pende>· sw; trabajos como Cuerpo Sobe/'ano, declarándose IMPOTENTE para enc:::uzar las pasiones políticas que todo lo arrollaban ... "

"El (nuevo·> Soberano Gran Comendador Perez de Tu- dela hizo esfuerzos admirables pam .•acar la Orden INC6- I,C.,'M E de fos RESPONSAB/UDADES que. po,. su FA- C!l. CONFUSl<)N con la institución nueva. PODIAN

!MPUTÁRSEI,E Y SE LE IMPUTABAN ... " Más tarde,

~egún el mismo .Uoísé.<> nos dice, cuando yá se arreglaron las cosas y "cuando los trabajos propios de los francmaso- nes regulares reconquistaron sin tumultos, desórdenes ni desmanes la libertad en 1834, valiéndose únicamente de los midioR que la.<> leyes conredian. . . y sin usar otros INS- T RUill ENTOS que los p1·opios de sus Talleres, de Paz

!J FJ'(de1·uidud Uuive~·sales, aquella 1w,'=?va institución, aquel Gl'ande O•·iente Nacional de España, aquellos Comuneros de Ca.,ti.lla., en ima palabra, DESAPARECIERON POR COMPLETO PARA SIEIM'PRE".

Esto en lo que respecta a los Cournn.'!ros de Castilla y contado por el Seer . ·. y Can.·. del repetido Supremo Con- sejo del Grado 33, el Hermcrno Moisés, o séase, Leandro Tomás Pastor. En cuanto a las llamadas Lo,qias Militarl!-s, dirémos1 entresacándolo de documentos nada sospechosos, que fueron establecidr:.s y organizadas por el Conde de Tilly (hermano del de Grasse-Tilly, jefe de la Masonería francesa a la sazón y delegado especial del Supremo Con- sejo de Charleston para-afrancesar la masonería española y hacer posible la entrada de los franceses en España) que era conocido en los Logias con el sobrenombre de Guz·

man. Las Logias l\1ilifares se com.ponían ~xclusivamente

de individuos del ejército y estaban sometidas a un Ins- pector General del Grado 33. miembro del Consejo Su- premo de la Masonería. Pero, se presentó con caracteres distintivos r.unriue esencialmente iguales. La logia mili- tar se llamó Trinchera; el Venerable se llamó Gran Ca- pitá.n; a los Vigilantes se les llamó Caudillos; a.l Maestro de Ceremonias, Ayudante; ~¡ Experto. Maestro de A r111<n>

o Preboste.; y a los Guarda Templos, Escuchas. ⁴⁴Los es-·

critos que en la jerga de las logias se llaman planchas, en las primitivas logií!.S militares se llamaban salvas; ]os trabajos se err..uezaban no a medio día en punto, como se dice en las logias. sino al toque de diana, y como es con- siguiente, terminaban a-1. toque de retreta".

La Masonería fundó en otros tiempos, para sus fines, el Grande Oriente Nacional de España de los Comuneros

( Pasn a la página siguiente)

Núm. 35.

Septiembre ESTUDIO 1 1923.

~fi;:~:>i~~~~:~;::@ii;::~¡iji):;:~'ID.iJ;:~@~~'.l'I~~:~~;:~ ;;~:::~;~~:®)il :::&(ii;:;::'.~l~:::;@;¡¡:::~~::::~~::::..'iiJ'ii!:::~1::::.:mgi:::~¡;jf_iil~::'.ii!'it~::'.:~·l(:;::~iJl

1 ¡BENDITO SEA DIOS! Í

jiiji]:;::J~iJ.i:i::::!fil!íp:::~:::~l!ü)f:;~¡_il_J;C;::::(i!.~::::Jm.t·::::!!C!~>:::[füB":;::¡g,oo;;::~;:;:: :;::.;wü1:;::1iJJtJ:::~:i::c_:u:::::::i::ci"J1::;;::~7Jf:::~~:;'.:'ü:'it':;~rttrül!i;::~ñ:·~~;::;;:cl;;::;::[lffi:~::::i(i:r:J:;~[J:(';C>:::~@:::~./!1~:~

Es grito que sale espontánea- mente de nuestro corazón. Cuan- tas veces somos testigos de algu- na deserción en las filas Católi- cas. cúbrese de luto el alma y las.

/.ágrimas nos nublan los ojos, pe- netrados de haber caído en la m:ís imponente de las desgracias un correligionario, victima de ajenos amaños o juguete de al- quna recia tentación. Y si por ventura pertenece el desertor al Sacerdocio, es, tanto ma11or nues- tro duelo, cuanto es de peores consecuencias el escándalo y no puede racionalmente suponerse en él ignorancia ni otras ate- nuantes explicables en un seglar.

Hace cuatro meses contesta- mos. en esta revista a una hoja volante firmada por un tal Sabi- no Rigor, donde se ponderaba la apostasía del R. P. Feliciano Sa- lud, atribuyéndola a haberle sido imposible "aguantar las indigni- dades 11 humillaciones que se ha- cen sufrir al clero filipino", lo cual desmentimos terminante- mente, porque teníG;mos a la ma- no datos aclaratorios de la tra- yectoria s,eguida por el anciano P. Salud.

Transcurridos apenas ocho meses desde la luctuosa fecha de su apostasía, la gracia divina tocó el corazón del P. Feliciano con tanta intensidad que, reti- rado a una celda del Observato- rio para meditar detenidamente sobre su determinación de dar la espalda a la Iglesia Católica.

Apostólica ¡¡ Romana, salió de la soledad decidido a volver al

ndi~ abandonado y dió hace al- gunos días público testimonio de su conversión.

Cuanta fuera nuestra pena al saber la caída del venerable Pá- 1-roco el.e Santa Cruz, fué nuestra satisfacción al enterarnos de ~.·1

alzamiento y brotó de nuestros labios un grito de expansión !!

de hacimiento de gracias al Cie- lo porque se dignara iluminarle con los resplandores de la luz de

la verdad y concederle fuerzas para llevar al cabo los propósi- tos formados lejos del ruido

·mundanal.

Y como suponemos que nues- tros buenos lectores han de sabo- rear con delectación el documen- to donde se encierra la Profesión de Fe del P. Salud. !! pues quien dió cuenta de su salida parece es- tar en el deber de anunciar su re- torno, para que en nada desme- rezca la fama del converso, va- nws a transcribi1' la. abjuración que hace al hijo pródigo tanto honor:

"Yo Feliciano Salud, sacer-

"dote de la diócesis de Lipa y

"natural de Santa Cruz, La-

"guna, de 62 años y 10 meses

"ele edad, arrodillado ante vos

"R. P. Juan Comellas d;o la

"Compañía de Jesús, especial-

"mente delegado por el Ilmo.

"y Rdmo. Sr. Obispo de Lipa,

"Dr. D. Alfredo Verzosa, y,

"teniendo con mi mano los

"Santos Ev2.ngelios <le Dios.

"profeso firmemente tener y

"creer que ninguno puede con-

"seguir la salvación eterna sin

"tener y creer con corazón sin-

"cero todo cuanto cree y en-

"seña la Santa Madre Iglesia

"C2.tólica Apostólica Romana.

"Me arrepiento de corazón de

"haber gravemente errado

".contra esa Iglesia de Cristo,

"porque me adherí y he pro-

"fesado los errores de la secta

"aglipayana y por ha.ber aten-

"tado contraer matri r.onio

"dentro de la misma.

"Mas ahora, doliéndome de

"todo corazón y arrepentido

"por la gracia de Dios de ha-

"berme adherido a la referi-

"da secta herética, la detesto

"y abjuro sinceramente, y con

"el mismo ánimo detesto y

"maldigo los demás errores y

"sectas contrarios a. la Santa

"Iglesia Católica Apostólica

"Romana.

"Finalmente creo y profeso

"todas y cada una de las ver-

"dades y dogmas revelados

"que tiene y enseña la Santa

"M2.dre Iglesia. Creo y pro-

"feso todo cul}nto se nos pro-

"pone creer por el sacrosanto

"ecuménico Concilio Vaticano.

"Creo y profeso que el Sumo

"Pontífice es Cabeza y Pastor

"Supremo ·de todos los fieles.

"puesto por Cristo Señor

"Nur:stro. para regir y apa-

"centar y gobernar la Iglesia

"Universal, al cual todos los

"fieles están obligados a obe-

"decer como a Maestro infa-

"lible. '

"Así Dios me ayude y estos Santos Evangelios que toco

"con mis propias manos.

"Esta profesión de fé Cató-

"lica que hago la suscribo de

"mi propia mano. En el Co-

"legio de San José. de Padres

"Jesuítas.-Calle del P. Fau-

"ra 406, Ermita. Manila. 4 <le

"Agosto de 1923". · FELICIANO SALUD.

iVluy consoladora resulta para

quiene.~ disfrutamos del benefi- cio de la Fe Católica esa decla- mción del que, habiendo salido a las afueras del recinto santo para paladear las cebollas de los gitanos, en la e8peranza de ha- llarlas más sabrosµ.s que los va- 1·iados manjares de la casa pa- terna. ruelve asqueado de cuan- to probara e:rtramuros !! e.rela- ma al pisar de nuevo e1 zaguán de su hogar: "í:reo y profeso que el Sumo Pontifice es Cabeza

11 Pastor Supremo de todos los, /ieles. puesto por Cristo Setior Nu.estro, parn regir y gobernar Y apacentar la Iglesia, Universal.

al cual todos los fieles están obli- oados a obedecer como a Maes- i ro infalible".

Dio.o. llene de bendiciones al R. P. Feliciano Salud.

CEFAS.

(Vi('llt' dt• lci páyi11a anft~rior)

de Castillu, porque "No DEBfA CONSENTIR SE PRO- MOVIERA EN SUS SAGRADOS TEMPLOS, NI QUE SE MANCHASE LA SAGRADA ESPADA DE LA OR- DEN ... PARA QUE NO PESASE SOBRE L.4 ORDEN FRANCMASóNICA LA RESPONSABILIDAD DE AQUELLOS ACTOS Y DISPOSICIONES ... " Ahora, lec:tor caro, ¿por qué y para qué, se ha fundado en Filipi- nao la sociedad de los Legionarios d,el Trabajo?

r~=~ A~~-~:-:~::T~~-:-~~~:-@

1

ABOGADOS

La historia se repite.

1

Roxas Bldg. N.o 212 Tel. 572

1892.

,.,_ _______ --- ---(i)

Vol 11. - 7 - Núm. 35.

Septiembré ESTUDIO l l92a.

¡Albricias, Tío Tijeras., albricias! Que la dicha le entra a V. poi· casa.

Tenemos un notición formidable, despampanante, que comunicarle. ¡Qué r¡oticia!

Pero no se la podemos comunicar toda entera y de una vez, porque equivaldría a ponerle a V.

en el trance de sufrir un síncope, de alegría, de satisfacción.

Aun dándosela a V. a cucharaditas, aun sirviéndose/a a V. por miligramos, nos, acompafia el temor de que podamos ser los causantes, aunque indirectos, de algún trastorno cerebro-espinal.

Mas, a pesar de los pesares, V. querrá enterars,e de la novedad y nosotros no tenemos i11con- 1,eniente en comunicársela, pero con una condición, ventajosa para V.

Y sea, que ha .de ponerse V. p1·imero a las ó1·denes de un doctor y someterse incot1dicional- mente a las precauciones psicoterápicas que él juzgare convenientes para evitar toda consecuencia desagradable que el choque de la noticia le pudiera en el s,istema nervíoso ocasiona1·.

¿Acepta V. la condición, Tío Tijeras? ¿Si?

Pues, o_ído a la caja.

¿Cuál es el acontecimiento cuya realización más desearía V., Tío Tijeras?

Vamos, sea V. sincero, porque estamos habituados a sus excentricidades y nada ha~rá de 1,-orp1·endernos ese deseo preferido que se guarece en los repliegues de su inquieto corazón.

Estamos y!Í muy habituados a la contemplación de ·las "pequeñeces," hwmanas, empolladas aun en alinas, al parecer, muy grandes, y ningun'.l de cuantas pueda V. descubrirnos habrá de cau- sarnos enojo, ni aun siquiera admiración.

¿Ni aun con todas estas consideraciones osa V. revelarnos, ese punto culmifmr¡.te del castillo de su ilusión? ¿Tanto rubor siente V. ante la idea de haber de descorrer u-¡m miaja, 110 m.á.s, el velo que oculta el mundo de sus apet-itos?

Bueno, nada importa. De tiempo atrás amamantamos la afición a bucear en las profundido,.

des de la psicología humana y tenemos yá alguna experiencia en achaques de diagnos,ticar.

A un amigo, y V. lo es nuestro, se le pueden exigir confidencias, es verdad. .Pero queremos lle- i·ar nuestra generosidad hasta donde nos fuere posible y renunciamos a arTam;arle a V, esa confesión

La amis,tad, si es verdadera, impone el sacrifido de toda satisfacción personal, aunque ha de ceder siempre el paso al imperativo del deber.

Aun allá dijeron los antiguos filósofos: "Amicus Plato, sed magis q.mica veritas", L,atirw,- jo, que vuelto al idioma hispano, dice: "Ni por el amigo debes. nunca sacrificar la verdad".

Tmducción que no la hacemos, precisamente por V., mas por otros menos iniciados en las in- terioridades de la lengua del Lacio.

Y vamos a entrar en materia, porque V, debe de estar impaciente por enterarse '!! acaso uo fo ·esté

yo

menos por desembuchar.

Todo se' andará, que más días, hay que longanizas.

Nuestra primera cautela será colocar a V., Tío Tijeras, en la mesa de disección.

No se apure V. por lo de la "mesa de disección", porque, aunque lo parezca, no llegará !a sangre al río, ni sufrirá V. siquiera el contacto ma erial del bisturí.

Aquí tratamos, como ha podido yá V. hacerse cargo, de cirujía espiritual. :V en la Ana.to.mía Psicológica (disimule V. la aparente paradoja) no han lugar los análisis de consecuencias hemo.

rrágica.s.

Se le anto.iará a V., Tío Tijer¡;¡s, que, con tantas digresiones. van tomando estos digestiVos rmparedados el cariz del cuento de la buena pipa.

Pero cate V. que, cuantas paradas hemos hecho hasta el presente, son a f(l.vor de su tranqui- lidad.

Que no a humo de pa.jas se ha hecho constar desde el principio e¡ temor de poderle dañ<ir con nues,tra revelación, y tan pronto como notamos algú.n asomo de cardiopalmia, m.etemos wano a los bl"Omuros y a la digital.

No es nuestra la culpa, Tío Tijeras. Es acaso exceso de precaución, mas, tratándose da un amigo, vale más pecar a beneficio suyo por car a de

mCÍ$.

que por carta de menes.

Vol. 11. - 8 ....,,. Núm. 35,

Septiembre ESTUDIO 1 1928.

!lágaae V., ¡¡ues, cargo, Tío Tijeras, de hallarse en posición supina sobi•e la mesa de disec.

ción.

Usted, Tío Tijeras, tiene más rabia a ESTUDIO que el diablo a la Cruz.

No necesitamos que V. lo confirme, porque es el primer resultado de nuestra auscultación psí- quica, apoyada en las 'observaciones de las ocho meses precedentes.

Esa antipatía que siente usted hacia esta revistilla se funda en haberle ella parado a V. los pies., situación violenta para quien está habituado a pisar recio y donde más le cigrada.

Tampoco este dato, reforzado con las experiencias de lo que va de año, requiere confirmación.

A usted, cuya afición a cobrar el barato es conocida de todo el Archipiélago Filipino, Y aun por 11em'.ura de las islas adyacentes, debe de dolerle semejante humillación como si le tuviesen pecho por tierra con una puya clavada en el colodrillo.

¡Chist! Cálles.e V., Tío Tijeras. No diga F. q1w no, porque no se lo hemos de creer. Así re- sulta del examen que venimos haciendo, y nuestro diagnóstico está refrendado por la conducta de V.

Si la cosa estuviera en su mano, V. nos. causaría todo el daño imaginable, hasta poder arran- carnos violentemente la existencia.

Admitida la premisa anterior, esta coilsecuencia se desprende por su propio peso. Además, la historia nos. dice que cuantos han caído al alcance de su pluma, digo, de s,us TIJERAS; lo han pasado muy mal. Y es de suponer que, entregados nosotros a su libre disposición, no nos fuera biq¡,

Como puede ver el Tío Tijeras. avanzamo.o. con l<t lógica en la mano y los ojos en el campo de experimentación. Camino seguro para llegar a la 11crdad.

Bueno, Tío Tijeras, descansemos un ratillo. Continúe V. en la posición supina, porque así se repondrá V. mejor de la fatiga de la auscultación.

Yá en otras ocasiones, hemos hecho notar el de~ahogo de "The Independent", es decir, de Tío Tijeras,

Sale a la calle cada sábado, gracias al desen!'uelto ROBO de ajenas cuartillas.

Vive únicamente del SAQUEO literario, lo cual le ha conquistado muy justamente la fama de CACO, de CACO cuya presa preferida son los es,critos de otras publicaciones.

Esto lo sabe yá todo Manila, porque lo dicen hasta los vendedores de "The Independent".

Precisamente hace algunos días se me presentó un galopín callejero de esos y ofreciéndome un ejemplar, me dijo con sonris,illa picaresca: "The Independent, Weekly del Tío Tijeras".

Como es natural, le miré con simpatía !/ a punto estuve de darle los quince centavos, pero por temo¡· de contribuir a la propaganda de la prensa impía, me limité a corresponder a su sonrisa con otra de amistosa inteligencia y regalarle media pesetilla, para que continuara voceando el "Weekl11 de Tío Tijeras,", en lugar de "The Independent".

Pues, bien. Todo hijo de vecino sabe que Tío Tijeras hace la revista con recortes de perió- dicos extranjeros.

Y en el último número ha tenido el tupé de pedir cuentas a otro hebdomadario local, porque se permitió copiar una información de "Tite Independent" sobre el Banco Nacional.

Así es el Tío Tijeras. El ROBA. sin miramiento alguno. de revistas y publicaciones cuan- to le conviene para su semanero, pero ¡ay si otro toma una información!

A eso queda reducida la voceada Etica Periodística.

Y ahora que hemos mentado esto de la Etica Periodística.

Es una muletilla de Tío Tijeras, el cual se vale de ella para salirse con la s,uya.

Pero, en sus manos, ofrece todas las características de los principios infundibuliformes.

El exige que los demás le guarden todo género d( miramientos, mas. cuando se trata de apli- carlos en beneficio ajeno, hace lo que los Protestantes con la Biblia.

Nuestro Director le envió dos semanas hi u11 artículo, en contestación a otro publicado por

"The Independent", rogándole caballer?samente la inserción.

Pero es el caso que no le convenía dar cabida en sus, columnas a escrita favorable a ESTUDIO.

Y "The Independent" se olvidó de la cacareada E;'tica Periodística y. . . lo encarpetó.

Bien, Tío Tijeras, bien. No esperábamos de V. cosa mejor, porque también es de todos co- nocida la caballerosidad de esa revista del "soto" y la "calleja.;'.

Cuantas veces (y son incontables) calumniásteis a algún ciudadano, como éste se propwiiera ha.,

Vol. U. - 9 - ^{Núm. 35.}